LOS ORÍGENES


 
Las aldeas en Rusia. Fuente: Blog descendientes de Alemanes del Volga (Consulta: 16/08/2014). Link



Los Comienzos de los Alemanes en Rusia

Mucho antes de la planificada colonización de campesinos alemanes en Rusia, ya se habían radicado alemanes. En la edad media se asentaron en el norte de Rusia (Nowogorod) comerciantes del norte de Alemania, de Hannover y Hamburgo, de la "Hanse Alemana" (unión de comerciantes). Bajo la regencia de Iván "el terrible" (1533 - 1584) fueron traídos especialistas a Rusia (artesanos, constructores, arquitectos, médicos, oficiales, entre otros), formándose una ciudad suburbana alemana como (Njemezkaba Sloboda).
Fue Pedro "el grande" (1682-1725) quien comenzó el proceso de la europeización en Rusia, atrayendo a muchos alemanes a su entorno. Sus descendientes ocuparon asimismo alemanes en puestos de responsabilidad en diplomacia y administración, así como en el ejercito. En las grandes ciudades como Moscú, San Petersburgo y Odessa existían comunidades alemanas con sus propias iglesias y colegios ejemplares. No obstante una situación diferente vivirían las comunidades colonizadoras campesinas.



Colonización planificada de alemanes bajo la regencia de Catalina II
Rusia contaba con enormes franjas de tierra fértil, despoblada y sin utilizar. Además, las guerras con Turquía a fines de siglo XVIII, extendieron enormemente el territorio ruso en el sur de Ucrania que apenas estaba habitado.  
Para conseguir nuevos ingresos a la corona, Catalina II promulgó un manifiesto el 22 de julio de 1763, en el cual se invitaba a todos los extranjeros dispuestos a radicarse en Rusia, así como a colonos alemanes que huían de tensiones internas, a poblar las estepas rusas cercanas al río Volga. Los principales puntos del manifiesto decían:

1)     Permitimos nosotros a todos los extranjeros que lleguen a nuestro reino a radicarse donde más les guste, en todos los distritos, donde cada uno prefiera.
2)     Permitimos nosotros a los extranjeros que lleguen, seguir su religión libremente y sin impedimentos, según sus costumbres y ritos.
3)     Ninguno de los colonizadores extranjeros que hayan llegado a Rusia deberán hacer ni la misma contribución a nuestra casa, ni serán obligados a prestar ni simples ni extraordinarios servicios. (El que se radicaba en zonas deshabitadas gozaba de 30 años libres, en otras regiones se concedían de 4 a 10 años)
4)     Aquellos extranjeros colonizadores que lleguen a Rusia no pueden ser obligados contra su voluntad, a prestar servicio militar o civil en todo el tiempo de su estadía.

Referente a la propiedad del campo y disposiciones del país, fueron de primordial importancia para la futura evolución de los colonizadores las siguientes normas complementarias:
1 - Todas las tierras se entregaban a las comunidades "para siempre". Como propiedad inviolable y hereditaria, pero no como propiedad individual, sino como bien de la comunidad.
2 - Estas tierras no podían venderse ni cederse sin conocimiento y la voluntad de la autoridad (administración comunal).
3 - Para mejorar y ampliar sus economías les era permitido a los colonos comprar tierras a personas privadas (en resumidas cuentas: para conseguir una propiedad privada).
4 - Las tierras cedidas por la corona, eran heredadas generalmente por el hijo varón menor (minoridad). Además, se les permitía a los colonos el derecho de la administración comunal, que dependía directamente de la corona y no de la administración interna zarista.

También es digno de mención que en cualquier momento se podía abandonar el imperio sin impedimentos. Así llegaron a Rusia los primeros contingentes de acuerdo al Manifiesto del año 1763 de Catalina II, entre los años 1764 y 1768. Para luego convertirse en una migración prácticamente permanente hasta el año 1862, casi 100 años después, con la llegada del último grupo.
Las primeras masas arribadas a la región del Volga provinieron principalmente de Hesse, Rheinland, Palatinado, Saxony, Wurttemberg y Baviera, y se asentaron en las zonas bajas del río Volga.  Ellos debieron instalarse en un área limitada por la ley, ya que en marzo del año 64 se establece un Código Colonial para determinar el orden los territorios coloniales.






 


 Foto 1: EN COLOR, LAS REGIONES ALEMANAS DE DONDE PARTIERON LOS PRIMEROS CONTINGENTES



Foto 2: EN LINEA MARRON LOS PRIMEROS CONTINGENTES – ZONA DE PARTIDA Y ÁREAS DE PRIMEROS ASENTAMIENTOS -

Fuente: CVGS  - The Center for Volga German Studies at Concordia University, Maps of Russia. Copyright © 2009-2013. [En línea] <http://cvgs.cu-portland.edu/archives/maps/russia.cfm> [Consulta: 11/2012]



El área donde les permitieron asentarse fue del lado oeste del río Volga o, como ellos lo llamaron, Bergseite, “zona montañosa”. Este territorio muestra una estepa montañosa, con una pendiente muy pronunciada, y recortada por ríos más chicos, quebradas y barrancos. Sumando a la dificultad del terreno, el árido clima, muy diferente al que ellos conocían en su Alemania de origen, fue determinante para que su principal elemento de planificacion fuera el propio río Volga.


Foto 3: ZONA DE PRIMEROS ASENTAMIENTOS EN EL BAJO VOLGA

Fuente: Teodosio Serrano, Profesor Dep. CCSS, Geografía e Historia. Tus ciencias sociales, IES AVERROES. Córdoba,  Spain - Blogger desde OCT/2010 © tuscienciassociales-teodosio [en línea] <http://tuscienciassociales-teodosio.blogspot.com.ar/2011/09/795-europa.html> [Consulta: 11/2012]


En los primeros cuatro años se establecen en la zona 104 aldeas alemanas. Algunas fueron abandonadas, dentro de las dos primeras décadas, pero otras incrementaron tanto su población que desde finales de 1840 se fueron fragmentando, estableciendo nuevos pueblos llamados Colonias Hijas. Estas llegaron a ser 68 aldeas más.
Hacia 1912 existian alrededor de 300 aldeas. Y para el año 1920, casi 400, considerando otras pequeñas aldeas llamadas “Chutors”, algo así como Colonias Nietas.




Foto 4: MAPA DE LAS ALDEAS RUSOALEMANAS EN LA REGION DEL VOLGA HACIA EL AÑO -
MAPA DE ALDEAS MADRES E HIJAS
Fuente: The Center for Volga German Studies. <http://cvgs.cu-portland.edu/images/map_dobrinka.jpg>
[Consulta: 11/4/2012]

Generalmente las colonias hijas estaban formadas por población de 1 ó 2 colonias madre, o bien, por aldeas más importantes. Estas llevaban el nombre de “Neu” (nueva) y seguido de este prefijo, el nombre de la colonia madre.
 
Igualmente es bastante complejo el análisis de las aldeas, sus ascendencias y descendencias, ya que cada una presenta, por lo general, varios nombres, a veces en ruso o alemán, tartárico, francés, o apodos. O peor aun, varias aldeas son llamadas con igual nombre. Por ejemplo, el pueblo de Yagodnaya Poliana se conocía también como Alt Yagodnaya, Poljana, Reinard, Baum y Jagoda.

Como ejemplo inverso, hubo tres Stahls, que sólo se diferenciaban por el río en el que se habían asentado, cuatro Rosenfelds y dos Hussenbachs. El prefijo Neu era determinante de una colonia hija, o el prefijo Alt determinante de una aldea madre
. [1]
El manifiesto de Alejandro I del 20 de febrero de 1804, ponía énfasis en atraer "inmigrantes" que podían servir de ejemplo agropecuario como buenos granjeros, viñateros, con conocimiento en plantaciones de moreras y otros árboles frutales, prácticos en la cría de ganado, pero sobre todo en el cuidado y cría de las mejores razas de ovejas. En fin, que tuviesen los mejores conocimientos para implantar una racional economía agropecuaria. En el así llamado "privilegio de gracia" de Paul I del 6 de septiembre de 1800, a los menonitas se les concedía el privilegio de librarlos para siempre de servicios civiles aun en caso de guerra, así como no jurar ante la justicia y la plena libertad de elegir un trabajo compensatorio.

Razones para emigrar
Los prometidos privilegios de los zares, parecían sumamente tentadores, teniendo en cuenta las situaciones penosas y las carencias, sobre todo en la ciudad de Essen y en el sudoeste de Alemania: la guerra de los 7 años, guerras napoleónicas, ocupación y poderes extranjeros con opresión política y también bajo la tiranía de los propios príncipes, servicios militares y servidumbre para los príncipes y fuerzas extranjeras, (por ejemplo: venta de soldados a América).
Tras una etapa de ilusión, pronto fue evidente que las tierras prometidas eran infértiles, y que se esperaba que sus hijos hicieran el servicio militar en el ejército ruso. Esto determinó un segundo y definitivo éxodo para los alemanes del Volga, quienes trasponiendo los mares decidieron alcanzar las nuevas tierras de libertad que florecían en el Nuevo Mundo: Estados Unidos y Canadá, Brasil, Argentina y Paraguay.
Muchos vinieron a Sudamérica, a Brasil en primera instancia. (Lo que explica por qué una de las aldeas se llama Aldea Brasilera). Y desde Brasil llegaron a Argentina, alrededor de 1880, cuando el gobierno les entregó tierras, herramientas y semillas. Para los argentinos de la época, el derrotero que llevaban estos migrantes era tan confuso que decidieron llamarlos directamente “rusos” y así se los apoda hoy día a sus descendientes.




[1]              Asociacion Argentina de Descendientes de Alemanes del Volga. <http://www.aadav.com.ar> [Consulta: 10/5/2012]